Mandela, cuanta tristeza...
Acabo de terminar la autobiografía de Nelsón Mandela. Sí, cuantas cosas valiosas. Un hombre que depuso sus intereses particulares en favor de la libertad de su pueblo. Así se ve, así se vendió a la humanidad, por algo tanto reconocimiento. Sin embargo al leer las notas que él mismo realizó ó avaló, pienso algo que asumo debe estar prohibido pensar, pero me es inevitable: será la historia de Mándela eso que lo mediático nos ha entregado?, ó podrá ser también su vida el recorrido de un hombre egoísta que puso su deseo de gloria por encima de su familia y que al final de sus días la frustración es compañera permanente?.
A lo largo de su narración el dolor por no haber estado con su familia es su acompañante. A las dos esposas, con quienes terminó separándose, les correspondió lidiar con la crianza de los hijos, y también con la ausencia de un marido. Y no me refiero a su tiempo de encarcelamiento, por el contrario se me ocurre pensar que esa circunstancia ayudó a que durara tanto su segundo matrimonio, pues era una situación que lo dejaba plantado en una categoria de víctima, me refiero al antes y después de la cárcel, durante esos periodos inisitió en no darle la prioridadad requerida a la familia.
La libertad lo posicionó como icono, su familia como un fantasma.
A lo largo de su narración el dolor por no haber estado con su familia es su acompañante. A las dos esposas, con quienes terminó separándose, les correspondió lidiar con la crianza de los hijos, y también con la ausencia de un marido. Y no me refiero a su tiempo de encarcelamiento, por el contrario se me ocurre pensar que esa circunstancia ayudó a que durara tanto su segundo matrimonio, pues era una situación que lo dejaba plantado en una categoria de víctima, me refiero al antes y después de la cárcel, durante esos periodos inisitió en no darle la prioridadad requerida a la familia.
La libertad lo posicionó como icono, su familia como un fantasma.
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